Cada historia es especial, pero ésta es tremendamente evocadora.
María decidió dejar su Transilvania natal para estar junto a Rubén. Sacrificó su país por amor, y su decisión le honra porque no ha sido tomada a la ligera.
Ya hace más de diez años que Rubén y María se conocen. Se enamoraron despacio, durante los veranos en los que ella trabajaba en Roquetas de Mar. Y se consolidó cuando regresó a su país, a la ciudad de Bistrita, para continuar sus estudios.
Lo que comenzó como un juego de verano se convirtió en una relación necesaria, imprescindible y sólida para los dos. Así que María tomó la decisión más importante de su vida: regresar a Almería, junto a Rubén y también cerca de su madre y sus hermanos.
Y Rubén, feliz, pues se ha salido con la suya. Desde que tiene 16 años el amor de María ha sido su objetivo y lo ha conseguido. ¡Enhorabuena, pareja!
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